Eres madre o padre. Tienes uno o varios niños pequeños. Quieres ir a la concentración para condenar el atentado de ETA del pasado sábado en el sur de Francia. ¿Qué haces? ¿Los llevas? ¿No? O eres discapacitado o una persona a cargo de un disminuido físico. Te planteas si puede ser peligroso o asfixiante. El ex defensor del menor de la Comunidad de Madrid, Javier Urra, opina que no debe haber problemas.
La concentración se llevará a cabo mañana martes a las 19.00 horas en la Puerta de Alcalá de Madrid. La organizan todos los grupos parlamentarios, los sindicatos y la patronal. La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) no ha secundado tal concentración por que asegura que no tiene sentido si el Gobierno ni ilegaliza ANV y el PCTV.
Desde Comisiones Obreras (CC.OO.), Conchita Zorraquin asegura que para un niño o un discapacitado puede ser agobiante acudir a este tipo de concentraciones, porque, por su altura, pueden llegar a tener incluso una sensación de ahogo, “aunque va a ser una concentración silenciosa, pacífica y, seguramente, sin incidentes”.
Alberto Rodríguez, de la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física (COFECEM), asegura que tanto las concentraciones como las manifestaciones son un factor de riesgo para el colectivo de discapacitados, especialmente porque no hay un registro y los que acuden lo hacen a título personal. Normalmente, eso sí, se habilitan lugares, en la cabecera si es una manifestación, para las personas con discapacidad, de tal manera que tengan suficiente espacio para su movilidad. De esta forma no estarían sometidos a riesgos.
Javier Urra, como psicólogo y ex defensor del menor de la Comunidad de Madrid, opina que “no hay ningún problema por que los niños y los discapacitados acudan a este tipo de concentraciones”. Distinto es, según él, cuando asisten a manifestaciones de tipo partidista, pero está bien que a los niños se les enseñe lo que está bien y lo que está mal, lo que se debe condenar y lo que no. “Cuando es contra la violencia yo lo considero hasta recomendable”. En cuanto al riesgo que pueda entrañar, en una concentración donde no vaya a haber fuerzas de opinión contraria el peligro es mínimo. “Con colocarse fuera de las masificaciones, por ejemplo, en los laterales, es suficiente”.
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